Adria y su frágil armadura

Había una vez una mujer llamada Adria, tenía el pelo negro, sus ojos eran marrones como la madera y su piel blanquita como la nieve.
Un día, Adria fue al bosque Sombrío. Adria se encontró con una piedra que era de color blanco y se fue a su casa, en la tribu la Tierra. Adria llevó la piedra a Berseker para que la metiera en una caja de cristal.

Una noche Adria dejó la piedra en la mesita. Al día siguiente Adria le pregunto a Beseker que si había visto la piedra. El le contesto:
- No, yo no la he visto.
Olaya llegó a la casa de Adria y le dijo:
- Adria, no te creas los que dice, te ha engañado, porque anoche lo vi tirar la piedra.
Beseker contestó:
- No, yo no la he tirado.
Olaya dijo:
- ¿Seguro que no la has tirado?
Entoces Beseker reconoció su delito y le dijo arrepentido:
- Como te he tirado la piedra te daré esta armadura.
Ella cotestó :
- Gracias Beseker
Beseker preguntó:
- ¿Seguro que no estas enfadada?
Ella dijo :
- No porque me has dado la armadura.
Pero Beseker dijo:
- La armadura es muy frágil y tienes que tener mucho cuidado
Olaya sin darse cuenta, con el codo, le dio a la armadura.
Adria exclamó:
- ¡RAYOS TRUENOS ¡¡ TRUENOS Y RAYOS!
Olaya dijo:
- Ha sido sin darme cuenta.
Entonces Olaya dijo que ente los tres podían arreglarla y juntos la arreglaron.

Realizado por Ana María Herrera